Sí, aquí estamos otra vez. No, no nos cansamos de Mallorca. Y sí, queremos que disfrutes al máximo tu estancia en la isla y hay TANTO por hacer y conocer cuando visitas esta joya mediterránea, que hace poco se nos ocurrió una nueva forma para presentaros los pueblos más bonitos de la isla.

Guía de bolsillo de Nakar: Deià

Solo tienes unos cuantos días y lo quieres ver todo. Conocemos ese sentimiento. Por eso sentimos la necesidad de ofreceros una solución para conocer algunas de las ciudades y pueblos más bonitos de Mallorca con un buen plan de ruta. ¡No pierdas tu valioso tiempo, sigue nuestra ‘guía de bolsillo’ y llévate a casa solo buenos recuerdos!

Deià: cultura y encanto en medio de la Serra de Tramuntana

Deià es un pueblo precioso situado en medio de la Serra de Tramuntana, convirtiéndose así en un sitio que vale la pena ver solo por su impresionante belleza. Ha sido el hogar de muchos artistas durante las últimas décadas, de ahí su estilo bohemio y encanto especial. Una vez allí entenderás que es fácil entregarte a tus instintos más creativos solo dando un paseo por el pueblo.

Como Deià es un pueblo bastante pequeño, podrás ver qué tiene para ofrecer en unas cuantas horas. ¿Nuestro consejo? Da un paseo por sus callejuelas empedradas, párate en sus tiendecitas y sube hasta el cementerio, porque te encontrarás con unas vistas es-pec-ta-cu-la-res.

Siguiente parada: una caña, un café o lo que quieras en ‘Sa Fonda’: más auténtico, imposible. En Sa Fonda la sonrisa se te escapará sola, hay un ambiente de buen rollo constante. Música en vivo y fiestas que se han convertido en leyendas urbanas forman parte de programa de Sa Fonda, si quieres divertirte por la noche, pero también es perfecto para picar algo: tapas, pa amb oli, hamburguesas o un trozo de tarta en una terraza muy bonita.

Otra parada obligada en Deià es la casa de Robert Graves. Este poeta y autor vivió en Deià desde 1929 hasta su muerte en 1985. La Fundación Robert Graves desde entonces adaptó su casa para que los visitantes conozcan más de su biografía y trabajo.

Ninguna visita a Deià está completa sin una comida en Cala Deià. En esta pequeña cala con el mismo nombre que el pueblo encontrarás uno de nuestros restaurantes favoritos: Ca’s Patro March. Si decides caminar del pueblo a la cala, tardarás unos 30 minutos. Si no te apetece dar un paseíto, hay un parking a 5 minutos del restaurant. Pescado fresco con vistas: ¡nos apuntamos!

Para finalizar un día ideal en Deià tendréis que hacer una última parada (también puedes pararte aquí al principio de tu día en Deià para escaparte de las multitudes): Na Foradada. Un pequeño bar y también un restaurante se encuentran ubicados en el borde de un acantilado con las vistas más impresionantes de la zona. Definitivamente es uno de los mejores lugares para disfrutar la puesta de sol en la isla, por lo que merece la pena una visita.