Si nos ha estado siguiendo en las redes sociales o has estado leyendo nuestro blog, sabrás que compartimos con vosotros información interesante sobre Palma y el resto de la isla. No es ninguna sorpresa que nos auto-cataloguemos como ‘Palma & Mallorca lovers’, es que somos muy pero muy fans de esta isla y nos encanta compartir nuestro conocimiento local con todos vosotros.

Hoy no hablaremos de un lugar en concreto, ni de una playa, ni de un plan de un día, de una visita «imprescindible», sino que nos gustaría hablar de algo que podrás llevarte a casa una vez te vaya de Mallorca. Se trata de un producto que ha sido parte de la tradición gastronómica de Mallorca durante muchos años.

Aceite de oliva de Mallorca: tradición y sabor

 

Con más de 750.000 olivos, Mallorca es, sin duda, una isla de olivos. Por lo tanto, ¡no es ninguna sorpresa que nuestra isla sea productora de uno de los aceites de olivas virgen extra más buenos de Mallorca! Además, si pensamos en la dieta mediterránea, es importante que sepáis que el aceite de oliva es uno de sus ingredientes clave.

El aceite de oliva de Mallorca es especial, ya que se produce a partir de un tipo específico de aceituna que solo se puede encontrar en la isla: las variedades ‘mallorquina’, ‘arbequina’ y ‘picual’. El aceite de oliva producido con estas variedades de aceitunas está protegido por la Denominación de Origen «oli de Mallorca».

Las características geoclimáticas de la isla la convierten en un lugar perfecto para producir aceite de oliva de alta calidad sin aditivos químicos. Una de las oportunidades para descubrir los distintos aceites de oliva de la isla y sus propiedades es la feria popular «Fira de s’Oliva», que se celebra todos los años en noviembre en Caimari. Sin embargo, encontrarás aceites de Mallorca en todas las épocas del año. Aprovechamos para compartir nuestros fabricantes de aceite de oliva mallorquines favoritos: Son Moragues, Llágrima Verde, Son Mesquidassa y Aubocassa.